Arte y ciencia

El arte y la naturaleza siempre han sido conceptos en comunión. Desde el Paleolítico al presente la humanidad ha representado a la naturaleza en sentido simbólico, mágico o decorativo. Ha dejado impreso en diferentes superficies a las plantas, los animales, los fenómenos naturales y las conductas sociales. Ha esculpido objetos desde amuletos pequeños o adornos a grandes edificios decorándolos con todo aquello observable en la naturaleza. En el arte prehistórico se ha utilizado la pintura, pero también las esculturas y los petroglifos (grabados sobre piedra mediante percusión o abrasión).

 

El arte es un medio de comunicación que también es utilizado por el sistema educativo. El modo más común en que los humanos aprendíamos en la escuela era por medio de libros, y todos ellos empleaban ilustraciones o imágenes para acercarnos a lo que no podemos acceder o comprender, por ejemplo, el dibujo de una ballena o la Luna, el esquema de un proceso químico o la escultura de la molécula de ADN, además de la maqueta del ecosistema de una laguna o del Sistema Solar y así, muchas modalidades más. A partir de la conectividad y los nuevos dispositivos tecnológicos el mundo audiovisual ha incrementado sustancialmente su expresión artística, encontrando en la web desde el diseño 3D de un objeto a una exhibición virtual de un museo, entre muchas otras aplicaciones.

 

¿Quién no ha garabateado o dibujado una flor en un papel mientras espera, largamente, durante una llamada telefónica? El vínculo de los humanos con la naturaleza ha sido quizás el primer tema en manifestarse en la historia del arte desde diferentes perspectivas y expresiones artísticas. El arte, además, refleja las circunstancias o cambios sociales y con ello los modos de considerar a la naturaleza y representarla. Hoy nos preocupa su conservación ya que experimenta graves problemas y un permanente deterioro. La divulgación sobre el cuidado de la naturaleza ha impactado en toda la humidad y muchas son las áreas y personas que se ocupan de tratar el tema, por ejemplo, los científicos, los docentes, los guardaparques, los medios de comunicación, los centros religiosos, distintas ONG’s, entre otros. Todos, de una manera u otra, aconsejan y fomentan en la sociedad acciones para cuidar el ambiente. Y lógicamente, la forma más impactante de generar un acercamiento o un aprendizaje es a través del arte. Por eso, es frecuente ver a artistas de diferentes disciplinas comprometerse ante las noticias sobre los desastres provocados por el cambio climático y el agotamiento de los recursos naturales. La representación artística de la naturaleza está conectada con la percepción social del mundo natural y, parte de la actual generación de artistas se ha comprometido en exhibir la amenazante intervención humana en la naturaleza. También hay artistas especializados en buscar y rescatar del anonimato a las especies, actuales o extintas, de los crípticos libros de ciencia que solo leen aquellas personas que las estudian. Tanto sea para hacer un dibujo descriptivo de una especie para un artículo científico como para socializarla en eventos divulgativos, estos artistas recrean objetos de estudio de la geología, la paleontología (paleoarte), la botánica y la zoología. En el ámbito de las ciencias naturales y antropológicas se intenta reconstruir o representar la vida de acuerdo con el conocimiento y las evidencias científicas en el momento de la creación de la obra.

 

En la publicación que está para descargar en esta página, la Fundación Azara presenta a quienes con su arte acompañaron las publicaciones (tanto técnicas como de divulgación), las exposiciones temporarias, las salas de los museos, la cartelería de áreas naturales protegidas y sitios arqueológicos, y los materiales educativos de la institución. La naturaleza y la cultura que se manifiestan en sus trabajos alcanzan a toda la sociedad motivando a quienes los observan, tal vez, induciéndolos a seguir el camino de la conservación del ambiente, el estudio de la diversidad biológica y cultural, o la exploración del pasado.

Dos décadas de arte y ciencia en la Fundación Azara. Aquí se puede acceder a la publicación de forma libre y gratuita.